Desde que lo conocí, siempre he admirado y envidiado a las familias que educan a sus hijos en el hogar... a lo largo de una año he podido ser una de ellas.

Creo que la educación debería estar centrada en el niño y no en el sistema, así criaríamos a niños más felices y capaces. Creo en mis hijos y quiero hacerles ver que todo es posible, que es cuestión de intentarlo.



23.2.11

Mirando atrás, reflexiones.

Hace tiempo, cuando B todavía no tenía unos 18 meses, empecé a buscar información para ayudar a una niña algo despistada. Así es como empecé a oir a hablar de la estimulación temprana, Glenn Doman y un montón de cosas más. Me apunté a una lista de gente que practicaba el método Doman, leí todos los libros de éste que pude conseguir y, aunque por aquel entonces yo apenas tenía tiempo, seguí el método con B lo que me fué posible. Todas las noches llevaba el portatil a la cama para ver si me llegaban mensajes de la lista... Poco a poco me fuí dando cuenta de que era algo demasiado rígido para nosotros. Creo que el método funciona pero no me gusta e nuestro caso. Sé que las personas somos capaces de mucho más de lo que nos desarrollamos, pero también creo que necesitamos tener nuestro espacio, nuestro tiempo.
Con el tiempo fuí cambiando de modo de ver y empecé a encontrar gente por la red que educa en el hogar. Me gustó la libertad que ésto te da, el respeto por los intereses de los niños y por su ritmo de desarrollo. Cada persona es un mundo y cada uno tiene un ritmo, una forma de ser. Creo que todos somos muchos más receptivos cuando escuchamos algo en lo que estamos interesados y no cuando nos dicen que debemos aprender tal lección porque toca.
Las razones que me llevaron a escolarizar a B fueron:
- mi falta detiempo.
- el euskera. Sé euskera pero mi lengua materna es el castellano, me expreso mucho mejor en ésta. El euskera es un idioma difícil, creo que es importante que lo aprendan desde pequeños. En el cole el idioma es el euskera.
- sería mentira si no pusiera entre las razones la costumbre... o la familia.

Estas tres razones cada vez van pesando menos. Veremos qué pasa.

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